En una entrevista para el programa “La Hora de las Mascotas”, el Dr. Martín Kuhn, médico veterinario, reflexionó sobre el mes del Día del Animal y también se refirió al protocolo de actuación para profesionales veterinarios frente a delitos contra el honor.
En ese contexto, el Dr. Kuhn destacó que la profesión veterinaria es una de las que presenta mayores índices de suicidio, depresión y separaciones. “La medicina, en general, no tiene horario”, expresó.
Remarcó además la importancia de que los propietarios de mascotas comprendan la realidad que atraviesan los profesionales de la salud animal, ya que, muchas veces, su honor y prestigio se ven injustamente cuestionados.
“Desde el Consejo Profesional de Médicos Veterinarios de Santiago del Estero defendemos el honor de nuestros matriculados y buscamos brindarles herramientas para que puedan actuar ante este tipo de situaciones”, explicó Kuhn.
Los delitos contra el honor son actos ilícitos que afectan el prestigio, la dignidad o la reputación de una persona. Este concepto no solo abarca las ofensas a la integridad moral del individuo, sino también aquellas vinculadas al ejercicio profesional, que en este caso afectan directamente a los veterinarios. La afectación de este tipo no solo impacta en su vida social, sino también en su desempeño laboral.
Por ello, desde el Consejo Profesional se repudia enérgicamente cualquier forma de calumnia o injuria, especialmente cuando estas tienen lugar dentro del ámbito de la comunidad veterinaria y son dirigidas hacia sus profesionales.
Con el objetivo de acompañar y proteger a los matriculados, se elaboró un protocolo orientativo para la actuación ante situaciones en las que los profesionales sean víctimas de calumnias o injurias, ya sea a través de medios de comunicación, redes sociales o plataformas de reseñas como Google Maps. Este protocolo está pensado para casos donde los ataques surgen a raíz del ejercicio profesional veterinario.
“La comunicación es fundamental para prevenir este tipo de situaciones. Desde el Consejo estamos al servicio de nuestros colegas y actuamos como ente regulador de la actividad profesional. En caso de detectarse irregularidades o fallas en el ejercicio de la profesión, nuestro rol es intervenir para corregirlas y brindar una solución adecuada”, concluyó.