A medida que se acercan las fiestas de fin de año, vuelve a instalarse un tema sensible para miles de familias: el impacto de la pirotecnia en las mascotas y en personas con hipersensibilidad auditiva, como niños con autismo. En este contexto, la médica veterinaria María Belén Acuña habló con La Hora de las Mascotas sobre una alternativa que comienza a crecer en Argentina: la terapia cannábica en perros y gatos con fobia a los ruidos intensos.
La profesional explicó que la propuesta surge a partir de trabajos impulsados por Veterinarios Canábicos de Argentina, organización que investiga y difunde el uso medicinal del cannabis en animales. “Es un buen momento para empezar a hablar sobre esto, porque se acercan las fiestas y es cuando más sufren los animales. Ojalá cada vez haya más conciencia y menos pirotecnia sonora, tanto por los animales como por las personas”, expresó.
Miedo o fobia: qué les pasa a los animales
Acuña remarcó la importancia de diferenciar el miedo, una respuesta natural ante una amenaza, y fobia, un cuadro mucho más severo.
“La fobia es un miedo desproporcionado, persistente y de origen neurológico. Lo que ocurre en el cerebro en ese momento no se corresponde con lo que el animal puede gestionar”, explicó.
Aunque la pirotecnia es la causa más conocida, la veterinaria indicó que estos episodios también pueden desencadenarse por tormentas, truenos u otros ruidos fuertes. Además, aclaró que suelen empeorar con la edad, porque el animal se vuelve más sensible y menos capaz de manejar el estrés.
Cómo reconocer los síntomas
Según la especialista, los primeros signos aparecen como ansiedad, pero pueden evolucionar rápidamente:
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Jadeo constante
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Temblor
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Vómitos o diarrea
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Respiración agitada
En los casos más graves, los animales pueden quedar inmovilizados, mostrar conductas de huida desesperada o tener reacciones agresivas, no por mal carácter, sino por incapacidad para gestionar el miedo.
“Ese es el gran peligro. En un estado de pánico no escuchan órdenes, no reconocen el entorno y pueden escapar”.
Una alternativa: terapia cannábica
Ante este panorama, Acuña señaló que la terapia cannábica se presenta como una herramienta posible dentro de un abordaje profesional. Se encuentra en proceso de investigación con evidencia clínica y científica para aportar los datos del uso de cannabis medicinal en animales de compañía.
“Funciona, es mucho más amoroso, no tiene efectos adversos yse combina con otras terapias integrativas”. La mayoría de las familias que conviven con animales fóbicos la pasa realmente muy mal. Por eso es importante hablar del tema, informar y buscar herramientas que mejoren su calidad de vida.
“E fundamental que cuando atraviese una situación de esta índole es crear un refugio, es decir un sector en la casa dandole las condiciones de penumbra y bloquear todo tipo de luz. No dejar ningún elemento que pueda llevar a un accidente. Hacerle contención implica abrazarlos, llevar sus juguetes, etc.
Resultados del trabajao de Investigación :
La veterinaria también detalló cuáles han sido los primeros resultados del estudio que impulsa junto a Veterinarios Cannábicos de Argentina. Según explicó, el trabajo se basa en un seguimiento observacional, realizado a través de encuestas y formularios que los tutores deben completar y actualizar con compromiso constante.
“El proyecto requería que los tutores participaran activamente: ingresar datos, aceptar el protocolo, registrar avances, enviar videos y acompañar todo el proceso de ajuste de dosis. No es solo ‘dar dos gotitas y esperar un resultado’, sino aprender a cuándo subir o bajar la cantidad y cómo contener al animal”, explicó.
En la investigación se administró un aceite con alto contenido de CBD aunque siempre en el marco del uso de planta entera, combinando THC y otros compuestos, y se registraron los cambios en cada caso.
“El resultado fue que la mayoría de los animales logró una buena evolución. En general aprendieron a gestionar mejor los episodios y a transitar la terapia con apoyo de sus tutores”, señaló.
Acuña comparó este proceso con el que atraviesan muchas familias con niños con autismo:
“Las familias que viven situaciones similares con sus hijos saben de lo que hablo. Es un acompañamiento constante, un trabajo conjunto. Pasa exactamente igual con los animales ”.