En diálogo con Mañana Fantástica, los candidatos del Frente Ciudadano, Carlos Casagrande y Oscar Céspedes, analizaron el clima electoral que atraviesa Santiago del Estero en la recta final hacia las elecciones provinciales, advirtiendo que existe un creciente descontento ciudadano frente a los mismos actores y propuestas de siempre.
Carlos Casagrande, candidato a gobernador, destacó la necesidad de ofrecer un gobierno inclusivo: “La gente quiere algo diferente, que realmente le llegue al pueblo. Nuestro objetivo es gobernar para todos, no solo para unos pocos. Hay muchas necesidades que no están siendo atendidas, especialmente entre jubilados y ciudadanos que requieren oportunidades laborales y esperanza.”
El candidato destacó que, durante la campaña, ha recorrido distintos puntos de la provincia junto a Céspedes, escuchando las demandas de la población y asegurando que su propuesta llega a quienes más lo necesitan.
Por su parte, Oscar Céspedes, candidato a Diputado Provincial señaló que la política tradicional en Santiago del Estero ha generado desconfianza y apatía entre los votantes: “Durante 20 años hemos tenido al mismo oficialismo y la misma oposición. La gente ve las mismas caras y escucha las mismas promesas. Esto genera que muchos se sientan desencantados y descrean del menú electoral que les presentan.”
Céspedes criticó la falta de debate entre candidatos y la reiteración de figuras políticas procesadas o cuestionadas, y sostuvo que el Frente Ciudadano representa una alternativa nueva y seria, capaz de ofrecer cambios reales en áreas como justicia, institucionalidad y respeto a la democracia. “Queremos que los santiagueños vuelvan a creer que se puede ser distinto, que haya una justicia independiente y nuevos valores en la política. Nosotros somos la fuerza del cambio, frente a un sistema que sigue ofreciendo lo mismo de siempre”, concluyó Céspedes.
Ambos candidatos coincidieron en que la participación ciudadana será clave para transformar el rumbo de la provincia, e invitaron a la sociedad a informarse y evaluar propuestas más allá de los nombres históricos que dominan la escena política.