La escritora y docente Clara Inés Sayago, oriunda de la ciudad de Fernández, compartió en una entrevista para el El Interior Santiagueño su pasión por la lectura y la escritura, una vocación que cultivó desde niña y que floreció con fuerza tras su jubilación. Con varios libros publicados, Sayago rescata historias, instituciones y paisajes de su región a través de la poesía y la palabra escrita.
“Siempre me gustó escribir. Desde chica lo hacía, escribía algunas cositas… Me acuerdo que cuando la maestra decía “composición” o había concursos, yo me anotaba. Y siempre ganaba. Me gustó siempre hacerlo”, relata con entuciasmo.
“Cuando me jubilé, decidí ordenar todo lo que había escrito; tenía cientos y cientos de páginas sueltas. Así nació mi primer libro, una obra sobre la fundación de Fernández. Después escribí otro libro dedicado a las instituciones de la ciudad, y un tercero sobre los árboles típicos de la región.”
“Siempre estoy preparando algo. La escritura es parte de mí desde siempre”, expresa firmemente Sayago.
El primer libro de la escritora Clara Inés Sayago se titula Ofrenda. Se trata de una obra que rinde homenaje a Jesús María Fernández, fundador de la ciudad de Fernández, a los primeros pobladores y a las familias que permanecen actualmente.
A través de versos cargados de sensibilidad, Ofrenda busca destacar el valor histórico y humano de quienes dieron origen a esta ciudad del departamento Robles. La autora reconoce en su obra el esfuerzo de aquellos inmigrantes que llegaron desde distintos países y eligieron asentarse en estas tierras, atraídos por su fertilidad, su riqueza natural y las posibilidades que ofrecía el lugar.
Fernández tiene una historia larga, construida con trabajo y sacrificio. A lo largo del tiempo, se fue consolidando como un punto comercial importante dentro de la provincia. Ofrenda no solo es un tributo a sus raíces, sino también una expresión de gratitud y reconocimiento hacia quienes, con coraje y perseverancia, ayudaron a forjar la identidad de esta comunidad.
Además también escribió Tacko; el algarrobo y otras especies vegetales autóctonas de Santiago del Estero y su tercer libro, Ciudad de Fernández, una mirada a sus intituciones y su gente.
