En diálogo con El Interior Santiagueño, el presidente del Club Atlético Icaño, Manuel De La Silva, realizó un balance del año deportivo e institucional, destacando la histórica participación de la institución en el Torneo Federal Amateur y los desafíos que atraviesan los clubes del interior.
De La Silva celebró el desempeño del equipo en un torneo que exige competitividad y organización. “Tuvimos la suerte de ganar el torneo en nuestra región y representar a la Liga Añatuyense de Fútbol. Logramos clasificar y jugar un nuevo Federal con un plantel íntegramente de Icaño, del departamento Avellaneda”, explicó. Aunque el equipo quedó afuera por un punto en la primera fase, remarcó que “se hizo un muy buen papel”.
Uno de los aspectos que más destacó el dirigente fue el esfuerzo económico y humano detrás de la participación. “Es muy difícil para un club del interior. No contamos con muchos comercios ni empresas que puedan sponsorear. Sin embargo, la comisión trabajó arduamente para solventar los gastos”, señaló. En este punto, subrayó un hecho que considera central: ningún jugador fue rentado.
“Quiero destacar que ninguno ha sido pagado. Han dejado el alma en cada partido. Eso es para valorar, tanto de los jugadores como del cuerpo técnico, algo que no pasa en otros equipos”, afirmó. También agradeció el acompañamiento de los municipios del departamento, de Añatuya y de la propia localidad, que colaboraron con gastos de viajes y logística.
Trabajo institucional y cantera local
El presidente resaltó con orgullo que el club mantiene todas las divisiones inferiores, desde el fútbol infantil hasta la reserva. “La mayoría de los chicos que jugaron surgieron de nuestra cantera. Eso demuestra el valor del trabajo que venimos sosteniendo desde hace años”, dijo.
Además del fútbol, el club también impulsa otras disciplinas. En la sede se practica básquet y vóley en articulación con el municipio aunque aún de manera amateur. “Es una materia pendiente oficializar estas competencias. El deporte es fundamental para los chicos, los aleja de cualquier situación negativa afuera”, sostuvo.
Infraestructura y desafíos estructurales
Uno de los grandes proyectos de la actual gestión es mejorar el campo de juego. “Nuestro deseo es tener una buena cancha con césped, pero el principal problema es la falta de agua en la localidad. Estamos trabajando para hacer perforaciones y resolverlo”, explicó. También destacó que el club cuenta con iluminación artificial, lo que permite disputar partidos nocturnos, especialmente en épocas de altas temperaturas.
Ocho gestiones y un compromiso que no se detiene
Con una trayectoria extensa dentro de la institución, De La Silva explicó que esta es su octava gestión en la conducción del club. “Cada gestión dura dos años. Hoy estoy por segunda vez consecutiva como presidente. Me acompaña gente responsable, que pone el hombro y trabaja de manera mancomunada para lograr los objetivos”, afirmó.
Finalmente, el dirigente reafirmó el espíritu que sostiene a los clubes del interior: unión, esfuerzo y compromiso comunitario. “Lo que logramos este año es muy significativo para Icaño. Vamos a seguir trabajando para que el club crezca y brinde más oportunidades a nuestros jóvenes”, concluyó.