Más de cien trabajadores rurales fueron rescatados en distintos operativos realizados en campos de las provincias de San Juan y Corrientes, donde estaban “en condiciones infrahumanas, dormían hacinados, sin agua potable, con hambre, sin baño y varios de ellos contagiados con sarna”.
Por su parte, en San Juan, “se detectaron 140 trabajadores traídos desde el norte del país por personas sin escrúpulos par la cosecha del olivo”, informó el secretario general de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre), José Voytenco, a través de un comunicado.
“Todavía hoy – agrega el escrito – a esta altura de la historia, hay quienes dicen que exageramos cuando decimos que hay explotación laboral y trata de personas en el campo”.
Enfatiza además: “Aquí también le cabe responsabilidad a los productores, a las empresas y al propio gobierno provincial, quien debe ejercer en primera instancia el poder de policía de trabajo”.
A su vez, en Corrientes, fueron “trabajadores forestales traídos desde la provincia de Misiones se encontraron en condiciones calamitosas, sin cobrar salarios desde el mes de enero, al borde de la desesperación, al punto que cuando llegaron los inspectores lo primero que hicieron fue pedirles comida porque estaban en estado de inanición, en medio de la plantación y sin comida por varios días”.
El dirigente gremial destacó la presencia en ambos casos del Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (Renatre)) en los rastrillajes y de Gustavo Vera, director del Comité Ejecutivo de Lucha contra las Trata y Explotación de Personas, dependiente de la Jefatura de Gabinete de Ministros.
