Se trata de dinero que incluye las transferencias automáticas y no automáticas. Si bien la recaudación nacional total sube 2,4%, al eliminar los fondos de seguridad social, los impuestos caen 5,9%. Con relación al 2023 las transferencias están 12% abajo.
Qué es lo que explica la recuperación de las transferencias: son los envíos no automáticos, que crecen 187% respecto del primer semestre del 2024, aunque siguen abajo 51% respecto del mismo lapso del 2023. Las transferencias discrecionales explican el 70% de la mejora respecto del año pasado, mientras que el 30% se corresponde con los envíos automáticos. De allí que ese mayor dinero tenga que ver con dinero que salió de la Nación.
No todo está claro en la coparticipación
La ley de coparticipación indica que los impuestos se reparten en un 44% para la Nación y un 56% para las provincias y luego, entre las provincias se hace una distribución secundaria. Pero si se incluye el total de fondos enviados comparado con la recaudación total de impuestos, los números varían.
Según indica el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), en un período que va de 1993 a 2024 los estados subnacionales se quedaron con entre el 25% y el 34% de la recaudación tributaria nacional. “Lo que se aprecia es que han habido permanentes cambios, la mayoría de ellas originados en pujas distributivas que terminaron en cambios legales de impuestos coparticipables y no coparticipables”.
El reporte indica que en 2024 las provincias y CABA participaron del 34% de la recaudación tributaria nacional total, dos puntos menos que el máximo de 2020. Eso se debió mas que nada a la desaparición del Impuesto PAIS. El IARAF plantea que “la discusión pasa por la distribución de responsabilidades del gasto entre la Nación y las Provincias y su lógico financiamiento”. “Es necesario establecer reglas de juego estables, que eviten un comportamiento como el que ha habido durante los últimos años”, se indicó.