Este domingo, un total de 630 camiones con ayuda humanitaria han cruzado las fronteras hacia Gaza, con la mitad de ellos destinados al norte del enclave palestino, según informó Tom Fletcher, subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios y coordinador de emergencias.
La entrada de estos camiones es el resultado del reciente acuerdo de alto el fuego, el cual marca una apertura después de meses de bloqueos logísticos y ataques directos por parte de Israel que impedían el paso de la asistencia.
Fletcher subrayó la urgencia de la situación: “Tras quince meses de guerra sin descanso, las necesidades humanitarias son alarmantes. No hay tiempo que perder”. Estos camiones habían estado esperando en las inmediaciones de Gaza hasta que la tregua entrara en vigor, permitiendo la distribución de alimentos y suministros esenciales para los supervivientes.
Entre los desafíos logísticos más críticos mencionados por Fletcher se incluyen las montañas de escombros y los artefactos explosivos diseminados por Gaza, lo que ha complicado el acceso a las zonas afectadas. Como consecuencia, la seguridad de los trabajadores humanitarios es una prioridad en este proceso.
La ayuda incluye alimentos no perecederos, como arroz, pasta y aceite, así como agua, manta, material sanitario y combustible, según confirmaron fuentes egipcias. El acuerdo estipula que 600 camiones de ayuda ingresen a Gaza diariamente, con 50 camiones destinados al combustible.