El indicador de sueldos utilizado por el Gobierno, la Remuneración Imponible de los Trabajadores Estables (RIPTE), tuvo un nuevo incremento en noviembre.
El indicador de salarios utilizado por el Gobierno, la Remuneración Imponible de los Trabajadores Estables (RIPTE), registró en noviembre de 2024 un incremento nominal de 2,8%, su tercera mejora consecutiva, que en términos fue del 0,4%. Pese a la racha positiva, en los primeros 12 meses de la era de Javier Milei perdió contra la inflación.
Controversias por la metodología del RIPTE
Los sueldos incluidos en el RIPTE son los correspondientes a los puestos de trabajo con una antigüedad de 13 meses o más. Se consideran los salarios de los puestos de trabajo del sector privado y del sector público nacional, provincial y municipal que hayan transferido sus cajas previsionales al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).
Además, sólo cuantifica los componentes remunerativos del salario (imponibles al sistema de seguridad social) y tiene en cuenta el monto salarial hasta el tope imponible definido para los aportes personales al sistema de seguridad social. Por estas características, varios economistas señalan que está influenciado más por la movilidad jubilatoria y los ajustes en los topes que por la dinámica de los salarios.
De hecho, en su propia página web la Secretaría de Trabajo explica que el RIPTE “es un indicador previsional que no necesariamente refleja el comportamiento de los salarios correspondientes al empleo asalariado registrado”.