Un informe de CICCRA confirma una tendencia sostenida: el argentino promedio consume apenas 49,5 kilos de carne vacuna al año, muy lejos de los 82 kilos de décadas pasadas.
El consumo de carne vacuna continua marcando una tendencia decreciente en Argentina. De acuerdo al último informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), el consumo por habitante de carne vacuna se ubicó en mayo en un nivel de 49,5 kilos/año.
Consultado sobre las exportaciones, afirmó que Argentina exporta menos que antes, pero que la recuperación es progresiva: “El problema fue que hasta hace un año y medio estaban casi prohibidas las exportaciones. Ahí sí Paraguay y Brasil aprovecharon para ganar mercado”.
Por último, relativizó la supuesta “invasión” de carne extranjera: “Aunque se diga que se cuadruplicaron las importaciones de carne vacuna, eso representa apenas el 0,05% del consumo interno. No tiene ningún impacto real”, concluyó.
Los precios de la carne aumentan por encima de la inflación
De acuerdo al Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), que analiza el desempeño de los precios de la carne, en el mes de mayo los precios de la carne aumentaron por encima de la inflación. Los valores de los distintos cortes registraron una variación de 2,6% con respecto al mes anterior. La cifra es superior al aumento del Indice de Precios al Consumidor que en el mismo mes registró una suba del 1.5%.
El incremento de los primeros cinco meses del año fue de 27,3% una diferencia porcentual del 14% fundamentalmente dada por la baja oferta que encarece los precios.
En los puntos de venta que atienden en barrios de nivel socioeconómico altos los precios de la carne vacuna varió un 3.3% su precio. Los medios del 2.5%. Mientras que en aquellos que atienden al nivel socioeconómico bajo los precios aumentaron un 2.4%.