Se espera que el cambio de clima se de durante la mañana, aunque para la noche el panorama presentaría una leve mejoría.
A medida que se aproxima la primavera al hemisferio sur y cada vez más se registran temperaturas más elevadas, se espera que este jueves haya un cambio rotundo en el clima de la región centro y parte del norte. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), un total de 14 provincias estarán bajo alerta por la llegada de tormentas, vientos y granizo.
El pronóstico informó que en las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Chaco, La Pampa y la costa de Biedma (Chubut) regirá un aviso de nivel amarillo por tormentas, a excepción del territorio pampeano, debido a que también contará con una segunda alerta por vientos. A lo largo de la jornada, se registraría una acumulación de agua que variaría entre los 25 y los 40 milímetros.
Por este motivo, las autoridades explicaron que se esperan tormentas que “podrían ser localmente fuertes, acompañadas de intensa actividad eléctrica y abundante caída de agua en cortos períodos”. No obstante, advirtieron que habría posibilidades de que se produjera caída de granizo ocasional y que las ráfagas de viento alcanzarían una velocidad máxima de 80 km/h.
Además de La Pampa, las provincias que también se verían alcanzadas por la alerta amarilla por vientos serán Córdoba, San Luis, La Rioja, San Juan, Mendoza, Neuquén y Río Negro. Los vientos provendrán desde el sector oeste a este y podrían alcanzar entre los 50 y 70 km/h, aunque no se descarta la aparición de ráfagas que superen los 100 km/h.
Sin embargo, las zonas más afectadas serán las capitales de San Juan, Mendoza y Neuquén, ya que el SMN activó una alerta naranja por vientos. Asimismo, en el territorio sanjuanino y mendocino también estarán alertados por riesgo intermedio a raíz del paso del viento zonda que había afectado al norte neuquino y sur mendocino este miércoles.
De acuerdo a los especialistas del organismo, el viento zonda podría ser intenso, debido a que la velocidad media variaría entre 50 y 65 km/h. Al mismo tiempo, el fenómeno climático podría alternarse con ráfagas de viento que superarían los 65 km/h, por lo que se reduciría la visibilidad, habría un aumento repentino de la temperatura y el porcentaje de humedad se mantendría en valores bajos.
Previo a esto, el meteorólogo del SMN Lucas Berengua había anticipado que “hay una situación meteorológica particularmente complicada que da lugar a varios alertas meteorológicos”, al explicar que se trataba de “un sistema de mal tiempo posicionado en el océano Pacifico y acercándose a nuestro país va a interactuar con aire cálido que ya está ingresando al centro del país”.
Como consecuencia de las condiciones climáticas adversas que afectarán a gran parte del país, las autoridades publicaron una serie de recomendaciones para evitar que los ciudadanos se pongan en riesgo. En el caso de las regiones afectadas por las tormentas, pidieron no realizar actividades al aire libre, no refugiarse cerca de árboles, postes de electricidad y/o estructuras que pudieran caerse.
Al mismo tiempo que recordaron mantenerse alerta ante la posibilidad de que caiga granizo, aconsejaron no permanecer cerca de playas, ríos, lagunas o piletas, con el objetivo de minimizar los riesgos de ser alcanzado por un rayo. Asimismo, solicitaron no sacar la basura y, en lo posible, quitar los objetos y elementos que pudieran obstruir los desagües.
Para aquellas personas que se encontraran en zonas alertadas por vientos y viento zonda, los expertos reiteraron el pedido de mantenerse en lugares cerrados y remarcaron que, si es inevitable salir, intenten reducir su exposición a la radiación solar. De la misma forma, solicitaron mantener distancia con cables eléctricos ante cualquier accidente que pudiera ocurrir.
Finalmente, subrayaron que estará prohibido generar fuego y utilizar materiales inflamables, debido a que la sequedad del ambiente incrementa los riesgos de que se propaguen incendios forestales. Sobre todo, después de los episodios que se reportaron en las últimas semanas producto de la falta de lluvias en la región.