Los jueces justificaron la decisión al sostener que la aprehensión de “L” infringía los derechos del niño en el marco del tratado que tiene Argentina.
La justicia de Córdoba liberó al adolescente de 14 años que asesinó a Joaquín Sperani el pasado 29 de junio tras darle 18 golpes en la cabeza con un fierro y un pedazo de hormigón.
Se trata de “L”, el mejor amigo de la víctima, que estaba detenido en un centro penal juvenil tras confesar que mató a Joaquín en medio de una “fuerte discusión”.
La Corte Suprema de la Justicia de Córdoba justificó la decisión al sostener que la aprehensión infringía los derechos del niño en el marco del tratado que tiene Argentina.
Mariela Flores, mamá de la víctima, manifestó que la noticia fue “cómo un baldazo de agua fría” pero que suponía que iba a suceder: “En algún momento va a salir, él nos conoce bien y temo por la seguridad de mis otros hijos. Siento que la vida de mi hijo no vale nada, es como si se hubiese matado a un mosquito, y eso duele”.
“Nunca existieron los derechos para Joaquín. Mató y salió como si nada”, se quejó Flores.
Por el momento no se sabe si el menor quedará a resguardo de sus padres y si volverá a la ciudad perteneciente al Departamento Presidente Roque Sáenz Peña de la provincia.
El Ministerio de Educación de Córdoba informó este martes que los directivos del colegio donde asistía la víctima fueron apartados.